viernes, 30 de octubre de 2015

La grandeza de antaño

Nos hemos de introducir en ese mundo que nos sorprende en positivo, que nos da aquello que nos propicia cambios para mejor.

Hemos de llamarnos amigos de la verdad con una sonrisa que nos destacará lo más singular. Lo que fue vuelve con un linaje perfecto, controvertido, singularizado, presto a las emociones más fuertes.

Nos haremos caso con destacadas caricias que nos llamarán por el mejor nombre posible. Hemos devuelto mucho.

Las premisas han sido con improntas, con cuanto nos divirtió. Nos rescatamos con resoluciones que han singularizado lo ideal.

Las premisas nos arrastran hacia el mar mismo. Hemos dispuesto los anhelos más singulares. Nos aclamamos.

Los aires nos dieron toda la juventud posible. Nos regalaremos, en adelante, mansedumbre. Hemos consolidado la grandeza de antaño. Los motivos los advertimos en los rostros. Seguiremos.

Juan Tomás Frutos.

No hay comentarios: