La vida eres tú

Miramos con el corazón
en la mano, sin puños cerrados,
procurando que el amor
sea la sintonía que nos enganche
a las esencias de una Naturaleza
que nos salvará,
si tenemos voluntad de ser sanados
espiritual y físicamente.

Nos contemplamos pacientemente,
con las enseñanzas de un destierro
que ya queda lejos,
por fortuna, con señales gratas.

Nos insertamos en un nuevo juego
que sabe a lo de siempre,
pero con afán solidario,
mezclando las ocasiones con el cariño
más brillante y sincero.

Nos ponemos de pie
y vamos al encuentro de la vida,
que hoy, para mí, eres tú.

Juan T.